Día Internacional del Bastón Blanco de Seguridad

El bastón blanco, es una vara que utilizan las personas ciegas para poder orientarse. 

Existen muchas historias sobre su invención y sobre quiénes lo inventaron, pero existe una que es la más creíble, su protagonista es José Mario Fallótico, político e inventor argentino, y comienza así: el mediodía del 22 de junio de 1931, Fallótico vio a una persona, que se trataba de una persona ciega, que se encontraba esperando para cruzar en la esquina de la calle Medrano y Lezica de la Ciudad de Buenos Aires. Fallótico ayudó al discapacitado, pero quedó obsesionado con una pregunta: ¿Cómo hacer para distinguir a un ciego y poder ayudarlo?

La idea siguió a este hombre hasta que dio con la solución que consultó en la Biblioteca Argentina para Ciegos: un bastón blanco serviría para distinguirlo.

José Fallótico nunca patentó su invento, fueron los estadounidenses quienes se adueñaron de la novedad, cuando George Benham, presidente del Club de Leones de Illinois, propuso para uso de los discapacitados visuales un bastón blanco con extremo inferior rojo, a fin de que se les otorgue prioridad de paso. La propuesta fue aceptada y en poco tiempo el uso de dicho elemento se hizo universal.

Seis simples consejos a tener en cuenta por los ciudadanos videntes colaborarán llegado el momento de ayudar a un discapacitado visual.
 
1 Ponerse en contacto con la persona, háblele. 

2 Ofrezca su ayuda: para guiarlo, para cruzar una calle, para orientarlo. 

3 Que la persona no vidente se tome de su hombro 

4 Que camine un paso por detrás suyo 

5 Su cuerpo le dará información a la persona ciega sobre desniveles, subidas o bajadas del terreno. 

6 Haga una pausa antes de iniciar la subida de un escalón o escalera. 

Todos podemos colaborar y ayudarnos entre todos. No hagamos diferencias, porque somos todos iguales, aunque algunos necesiten más cuidados que otros.

Edición: Valeria Ledesma